¿Por qué tener un estanque?
El agua es el elemento fundamental de la vida y, al tener un estanque o lago en tu jardín, la naturaleza responderá rápidamente trayendo animales, como aves e insectos, y estimulando la flora; en resumen, enriqueciendo el ecosistema. De hecho, los sistemas acuáticos son los más eficientes en la naturaleza ya que las plantas tienen un continuo acceso a agua con nutrientes disueltos en ella, lo cual incluye los aportados por peces y otros animales.
También, a la hora de construirlo, consideramos su valor estético: la calma que transmite el sonido de una fuente al romper la superficie del agua o la paz que aporta el sentarse frente a ella.
Pero si queremos ponernos más específicos, éstas son las razones por las que tener un estanque es siempre una buena idea:
- Incrementa la biodiversidad en tu jardín y huerta, atrayendo animales e insectos que pueden contener a las plagas, como libélulas, lagartos, aves, etc.
- Protege de la contaminación acústica, en particular si tiene una catarata.
- Acuacultura: podemos criar peces, además de plantas para su consumo. En nuestro caso, no tenemos intención de criar peces como comida.
- Todo el exceso de plantas que se produce es un excelente aporte para el compost.
- Un estanque crea un microclima a su alrededor, es un amortiguador de la temperatura, absorbiendo el calor durante el día y liberándolo durante la noche.
Construcción de un estanque
Forma y profundidad
A la hora de cavar un agujero para el estanque hemos de tener en cuenta que diferentes plantas requieren de diferentes profundidades. En general, se puede organizar en 4 alturas: una primera zona casi a nivel de la superficie para que aves y otros animales puedan beber o bañarse a salvo; después, un espacio o escalón de unos 10cm de profundidad para plantas de borde (como juncos o papiros); a continuación, otro escalón más profundo, de unos 20-30cm para plantas que se adapten a mayor profundidad (como colas de zorro) y por último el nivel más profundo (mínimo 50cm) para plantas como los nenúfares o lotos, que tienen sus raíces al fondo del estanque.
Esta profundidad mínima de 50cm es también muy importante para los peces: es ahí podrán refugiarse de las temperaturas extremas, ya sean heladas o días de mucho calor.
En resumen, dividimos el estanque en 4 niveles:
- Nivel 0: Está al nivel de la superficie del agua y permite a las aves, insectos y animales beber o bañarse a salvo. También se pueden poner balsas o tablas que floten para esta función, o algo que sobresalga.
- Nivel 1: 10cm de profundidad para las plantas de borde.
- Nivel 2: 20-30cm para plantas de borde de mayor profundidad.
- Nivel 3: Mínimo de 50cm para nenúfares y lotos y como refugio para peces.
¿Qué hicimos nosotros?
- Nivel 0: Lo tenemos cubierto con piedras pequeñas. Probamos a colocar una balsa con comida para pájaros en mitad del estanque pero la terminamos retirando porque instalamos un comedero cerca. Al sur hay unos romeros para dar sombra, y todo el borde está tapizado con romero rastrero.
- Nivel 1: 15-20cm de profundidad para las plantas de borde, con un escalón colocado orientación sur para plantas que den sombra y ayuden a reducir el impacto del sol sobre la superficie.
- Nivel 2: 30cm de profundidad.
- Nivel 3: 120cm de profundidad.

Impermeabilizar el fondo del estanque
En general, hay dos formas de hacerlo:
- Lona de plástico: Tiene varios puntos a favor, como ser barato, fácil de conseguir y de instalar, y poner plantas es fácil ya que sólo hay que colocar las macetas. Como puntos en contra, algunos plásticos pueden contaminar el agua, los rayos UVA los degradan y, si hay fugas, hay que buscar el agujero y arreglarlo. Se recomienda poner mantas debajo del plástico para protegerlo. En cuanto a los rayos UVA, en muchos estanques se cubre el plástico con piedras, que se pueden fijar con silicona, protegiéndolo del sol además de aportar una gran toque estético. Si se opta por el plástico, el mejor material con diferencia es el EPDM: es muy resistente, en particular a los rayos UVA – suele tener 20 años de garantía -, y no contamina el agua.
- Fondo de arcilla: En la permacultura, y para aquellos que quieran algo más natural, se puede hacer una capa muy compacta de arcilla que impide que el agua se filtre. Las plantas se ponen directamente en la tierra. Para este enfoque, os recomendamos que leáis guías al respecto.
¿Qué hicimos nosotros?
Compramos una lámina de plástico EPDM de 4x3m y 1mm de ancha por 74 euros. No pusimos
nada debajo – el material era duro – ni cubrimos el plástico con piedras, pero esperamos que con
las plantas de borde y de superficie podamos proteger del sol el plástico para retrasar su
degradación el mayor tiempo posible.
Los elementos del estanque
Para que un estanque sea un ecosistema equilibrado, es muy importante que posea todos los
elementos que posee en el entorno natural, esto es, flora y fauna. En particular, es fundamental
que el agua esté oxigenada y no tenga exceso de nutrientes, tales como nitratos o fosfatos, ya que
entonces abrimos la puerta a la proliferación de algas – nuestro gran enemigo.
Agua
Siempre que haga falta rellenar el estanque con agua de lluvia. Nunca usar el agua del grifo, que
contiene cloro y puede dañar tanto la flora como la fauna del estanque.
Flora
La forma de pensar en las plantas está basada en la permacultura: igual que la flora de un bosque
se puede dividir en 7 capas diferentes, la flora del estanque está dividida en 4:
◦ Plantas flotantes con raíces en tierra: tienen las raíces al fondo del estanque y sus hojas
suben hasta la superficie. Aportan sombra, inhibiendo el crecimiento de algas, y un lugar
donde los peces se pueden esconder. Algunas tienen flores espectaculares, como los
nenúfares y los lotos.
◦ Plantas oxigenadoras: En general están sumergidas, aunque también las hay que pueden
flotar. Son fundamentales para mantener el estanque sano y con el agua más clara.
Absorben dióxido de carbono y liberan oxígeno en el agua, necesario para la vida acuática,
como los peces y los insectos acuáticos. Suelen requerir de muchos nutrientes, en
particular nitratos, razón por la que es importante que haya peces, cuyos excrementos
hacen ese jugoso aporte. Pueden crecer rápidamente, por lo que se deben cortar si hay en
exceso: son un buen aporte para el compost.
◦ Plantas flotantes: Son plantas que flotan en la superficie del estanque y no necesitan ni
tener raíces en el suelo ni estar ancladas a algún sitio. Sobreviven absorbiendo nutrientes
del agua. Controlan el crecimiento de algas restringiendo la cantidad de luz que llega al
agua. Al igual que las oxigenadoras, pueden crecer muy rápidamente, por lo que no hay
inconveniente en llevar al compost lo que esté de más.
◦ Plantas de borde: Estas plantas crecen a los bordes del estanque, y aportan sombra,
protegen del viento y pueden hacer de refugio para animales e insectos.

Las dos reglas para alcanzar el equilibrio en un estanque son:
La proporción de plantas por cada metro cuadrado de superficie es:
• Una planta de superficie con raíces al fondo.
• Tres plantas oxigenadoras
• Una o dos plantas de borde
La superficie:
• Debe estar cubierta entre una tercera parte y la mitad por plantas de superficie y de
superficie con raíces al fondo.
• O, por el contrario, la superficie del estanque nunca debe estar cubierta más de la mitad
por plantas florantes
